La miel cruda de abejas provee energía al organismo porque lleva en su composición carbohidratos (glucosa, fructosa). Sin embargo, la respuesta hormonal de la miel cruda de abejas no es la misma que desencadena un “alimento” con azúcar añadido. La afectación de glucosa postprandial cuando se endulza con mieles crudas es diferente a la que genera el jarabe de maíz de alta fructosa.

Sobre la miel cruda y el jarabe de maíz de alta fructosa se debe recordar que ciertamente -el jarabe de maíz de alta fructosa- no eleva glucosa en sangre porque no requiere insulina para ser metabolizado, no obstante, la fructosa que contiene despues que se absorbe es transportada al hígado, donde es fosforilada por una enzima (fructoquinasa) a fructosa 1 fosfato, entrando en unas vías bioquímicas de oxidación y en el hígado se van a sintetizar ácidos grasos, triglicéridos y colesterol. Tenga en cuenta esta información si usted es diabético y su médico/endocrino/nutricionista le prohibe usar miel de abejas. Importante tener presente la salud hepática, hígado graso. Infórmele a su médico sobre las mieles de bajo índice glicémico http://imiel.co/del-indice-glucemico-ig-y-la-miel-de-abejas-cruda-y-pura  y, que contrario a los endulcorantes o el azúcar refinado la miel cruda provee otros beneficios como enzimas, probióticos, prebióticos, minerales y vitaminas.

Consumir dosis adecuadas diarias de miel cruda recupera/potencializa la relación digestiva con el cerebro mejorando el estado de ánimo.

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