La apibotánica es una disciplina que se enfoca en el estudio y conocimiento de las plantas que son útiles para las abejas, proporcionándoles recursos esenciales como néctar, polen y resinas.

Los apicultores están constantemente interactuando con las plantas que son beneficiosas para las abejas, desarrollan calendarios florales porque esto tiene un impacto directo en la salud y productividad de las colmenas. Al conocer las plantas nectaríferas, que proporcionan néctar, y las poliníferas, que suministran polen, los apicultores pueden ubicar sus colmenas cerca de estas fuentes de alimento y mejorar así la nutrición de las abejas.

Además, las resinas que ciertas plantas producen son utilizadas por las abejas para la elaboración de propóleos, una sustancia que utilizan para sellar y proteger su colmena de patógenos y parásitos, así como para mantenerla limpia y desinfectada.

La apibotánica es una herramienta valiosa para los apicultores, especialmente en regiones tropicales donde la diversidad de flora es abundante. Al comprender la relación entre las abejas y las plantas, los apicultores pueden tomar decisiones más informadas sobre la ubicación de sus colmenas y la diversificación de los recursos disponibles para sus abejas.

Con el conocimiento de la apibotánica, los apicultores pueden contribuir a la conservación de la biodiversidad, ya que al cuidar y proteger las plantas beneficiosas para las abejas, también se contribuye a la preservación de los hábitats naturales y el equilibrio ecológico.

En conclusión, la apibotánica es una disciplina valiosa en la apicultura tropical, ya que promueve la comprensión de la relación entre las plantas y las abejas y guía a los apicultores en la provisión de recursos esenciales para sus colmenas. Al cuidar y proteger la flora que beneficia a las abejas, se contribuye a la salud y bienestar de estos importantes polinizadores y al ecosistema en general.