En este periplo sobre comprender las crisis de dolor de cabeza que padecí por muchos años encontré -por fortuna- que existe una relación entre el perfil psicológico y la incidencia de dolor de cabeza, incluída la migraña; y el perfil de la personalidad, la capacidad de diligenciar -de manera correcta-, las emociones y la tendencia a la depresión. Si bien cada persona es única y la relación entre el perfil psicológico y el dolor de cabeza puede variar, se han identificado algunos patrones comunes.

• Del estrés y la ansiedad -como mencionamos antes- son factores psicológicos conocidos por desencadenar o empeorar los episodios de dolor de cabeza en muchas personas. Las personas que experimentan altos niveles de estrés o que tienen trastornos de ansiedad, como el trastorno de ansiedad generalizada, pueden ser más propensas a experimentar dolores de cabeza, incluida la migraña.

• Del perfil de personalidad: Algunos estudios han sugerido que ciertos rasgos de personalidad pueden estar asociados con la frecuencia y la gravedad de los dolores de cabeza. Por ejemplo, se ha encontrado que las personas con rasgos de personalidad tipo A (competitivas, orientadas al logro, impacientes) tienen una mayor predisposición a la migraña en comparación con las personas con rasgos de personalidad tipo B (relajadas, menos competitivas). Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos patrones son generales y no se aplican a todas las personas.

• De la tendencia a la Depresión: Existe una relación bidireccional entre la migraña y la depresión. Las personas con migraña tienen un mayor riesgo de desarrollar depresión, y las personas con depresión tienen un mayor riesgo de experimentar migrañas. La depresión puede influir en la percepción del dolor y en la forma en que una persona maneja y se adapta a los desencadenantes de la migraña.

Es importante destacar que la relación entre el perfil psicológico y el dolor de cabeza es compleja y multifactorial, como lo hemos enunciado antes, porque no todas las personas con un perfil psicológico determinado experimentarán dolor de cabeza, y no todas las personas que experimentan dolor de cabeza tendrán un perfil psicológico específico. Otros factores, como la genética, el entorno y los desencadenantes individuales, también desempeñan un papel importante en la aparición del dolor de cabeza.

Varios autores han explorado muchos aspectos de la migraña, incluído el perfil psicológico asociado a los estados emocionales. Según estas investigaciones y observaciones clínicas, han sugerido que algunas personas con migraña pueden tener ciertos patrones de personalidad y responder de manera particular a los estados emocionales intensos.

En este importante contexto los aspectos -a mi modo de ver- relevantes en relación al perfil psicológico de las personas con migraña incluyen:

• Personas Altamente Sensibles (PAS): Algunas personas con migraña pueden ser más sensibles y reactivas a los estímulos emocionales y ambientales. Pueden experimentar emociones intensas y tener una mayor susceptibilidad al estrés.

• Perfeccionismo y autoexigencia: Se ha observado que algunas personas con migraña tienen rasgos perfeccionistas y tienden a autoexigirse mucho. Pueden tener altas expectativas de sí mismas y ser propensas a la autocrítica.

• Empatía y sensibilidad emocional: Se ha observado que las personas con migraña a menudo tienen una mayor empatía y sensibilidad hacia las emociones de los demás. Pueden ser muy conscientes de las dinámicas emocionales en su entorno.

Si considera que está experimentando dolor de cabeza frecuente y siente que su perfil psicológico puede estar relacionado, es apropiado buscar el apoyo de un profesional de la salud, psicólogo, quien pueden evaluar su situación de manera más específica y brindarle un enfoque de tratamiento personalizado. Asimismo volcar la mirada a su alimentación; proveerle a su cuerpo alimentos densos en nutrientes, que mantengan la homeostasis de su organismo, alimentos nutraceúticos como los que secretan las abejas.